Síntomas de cojera en caballos
Signos y síntomas de cojera en caballos
- cojeando
- Ascenso de cabeza
- Manteniendo un pie en alto
- Incapacidad para girar suavemente
- Arrastrar un dedo del pie
- No levantar los cascos
- De pie, desequilibrado
- Rendimiento más lento
Los síntomas de cojera en los caballos varían desde los más evidentes hasta los más sutiles. Los caballos cojos pueden cambiar su peso de una pata a otra con inquietud. Pueden permanecer con las patas muy abiertas o recogidas bajo el cuerpo. Algunos incluso levantan una pata del suelo. Al moverse, soportan más peso sobre la pata sana que sobre la lesionada, lo que provoca que su cabeza se balancee hacia arriba y hacia abajo. Observando los hombros y las caderas, es posible ver cómo la extremidad sana se hunde ligeramente más que la lesionada, ya que soporta el peso del cuerpo. Los caballos cojos a menudo no giran con fluidez y no pueden correr tan lejos ni tan rápido como los caballos sanos.
Los caballos que cojean por problemas en los cascos retiran la pata dolorida al presionarla o golpearla con un probador de cascos. Puede haber pus drenando de un absceso interno. Los abscesos ascienden hasta drenar por encima de la pared del casco, a la altura de la banda coronaria. Los vasos sanguíneos que irrigan el casco pueden presentar un pulso fuerte. Los caballos que cojean por problemas articulares suelen presentar calor e inflamación en la articulación afectada. Comparar la pata coja con una sana permite observar la diferencia. Los caballos que cojean por problemas de ligamentos y tendones suelen retirar la pata si se les comprime el ligamento o tendón.
Los caballos cojos a menudo no levantan los cascos del suelo porque levantarlos requiere que las articulaciones se doblen, lo que les causa dolor. Estos caballos dan pasos cortos y pueden arrastrar la punta del casco en lugar de balancearla hacia arriba describiendo un arco normal.
Diagnóstico de cojera equina
Dado que la cojera equina tiene muchas causas potenciales y se ve influenciada por la conformación, la nutrición y la actividad, puede resultar difícil diagnosticarla correctamente. Normalmente, los veterinarios comienzan haciendo estas preguntas:
- ¿Qué edad tiene tu caballo?
- ¿Cuál es la rutina habitual de tu caballo?
- ¿Su caballo es de alguna de las siguientes razas: pura sangre de carreras, caballo de rodeo, caballo de doma clásica o caballo de concurso completo?
- ¿Cuánto tiempo lleva cojo su caballo?
- ¿Qué estaba haciendo su caballo cuando comenzó la cojera?
- ¿La cojera ha empeorado o mejorado?
- ¿Su caballo está tomando algún medicamento?
- ¿Cómo y cuándo le herraron (le pusieron herraduras) a su caballo?
- ¿Ha estado enfermo su caballo o ha estado enfermo alguno de los caballos del establo?
- ¿Qué vacunas ha recibido su caballo?
Con esta información, su veterinario podrá realizar un examen físico y buscar calor, inflamación, dolor y pulsos palpitantes. Es posible que se le pida a su caballo que haga cuerda al paso, al trote y al galope. Se examinará a su caballo mientras se desplaza en línea recta y en círculo. Su veterinario comprobará si hay dolor en los cascos y palpará las articulaciones, la columna vertebral y los músculos. Si el problema no es evidente, su veterinario podría realizar un bloqueo nervioso.
Los exámenes de cojera en caballos pueden incluir diferentes técnicas de diagnóstico por imagen: radiografías, ecografías, termografía, resonancia magnética (RM) y tomografía computarizada (TC). Las radiografías muestran los huesos e identifican fragmentos óseos, pero no son útiles para diagnosticar lesiones de tejidos blandos. La ecografía identifica lesiones de tejidos blandos, pero no ayuda a diagnosticar problemas óseos. Una RM muestra las superficies articulares y los tejidos blandos, como tendones y ligamentos. La termografía identifica áreas de inflamación. La TC muestra todos los tejidos, incluyendo los huesos.