Rabia en perros y gatos
¿Qué es la rabia?
La rabia en perros y gatos es una enfermedad viral mortal que se transmite por mascotas y animales salvajes infectados, generalmente mediante mordeduras. La rabia causa una enfermedad fatal porque ataca el sistema nervioso, alterando el funcionamiento del cerebro y el comportamiento de los animales. Se transmite fácilmente de animales a personas (zoonosis), pero se puede prevenir mediante la vacunación de las mascotas. En Estados Unidos, se gastan más de 300 millones de dólares anuales en la prevención y el tratamiento de la rabia.
Datos clave sobre la rabia en perros y gatos
- La rabia se transmite a través de la saliva o los tejidos infectados, especialmente el cerebro.
- Los murciélagos, los mapaches, las mofetas y los zorros son portadores de la rabia.
- Por ley, la vacuna antirrábica debe administrarse bajo la supervisión directa de un veterinario.
Los perros y gatos que viven en zonas de transición entre áreas urbanas y rurales son los más propensos a contraer la rabia. Con la construcción de viviendas en estas zonas periféricas, las mascotas entran en contacto con coyotes, zorros, mapaches, zorrillos y murciélagos rabiosos. Todos los mamíferos, incluyendo el ganado, las mascotas y las personas, son susceptibles a la rabia. En 2004, se registraron 6836 casos de rabia en animales y ocho casos en humanos en Estados Unidos. Más del 90 % de los casos de rabia animal se dieron en animales silvestres: mapaches, zorrillos, murciélagos y zorros. Alrededor del 8 % de las infecciones por rabia se produjeron en animales domésticos: perros, gatos y ganado. El estado de Texas tuvo el mayor número de animales rabiosos. La mayoría de los casos de rabia en perros y gatos no se dan en animales callejeros, sino en mascotas, debido a que sus dueños no las han vacunado. Antes de que la vacunación fuera obligatoria en muchas comunidades, más del 90 % de los casos de rabia notificados anualmente correspondían a mascotas y animales domésticos. Esto ha cambiado, y hoy en día, solo el 10 % de los casos de rabia en Estados Unidos se producen en mascotas y animales domésticos.
Por ley, todas las mascotas deben ser vacunadas contra la rabia cada 1-3 años.